lunes, 1 de octubre de 2018

Los sagrados taludes de los aborígenes canarios


La altura de estas paredes basálticas verticales alcanza
los 600 metros sobre la superficie marina


LOS GIGANTES

Aquí fue donde los dioses inmortales se hicieron pétreos
y la insignificancia del hombre dio sus primeros pasos.
Vinieron del norte o desde el sur y “¡Evohé!” gritaron
los filibusteros que bordeaban la isla del infierno.




Los acantilados se hallan dentro del Parque Rural de Teno

Avizoro las cúspides basálticas del Teide volcánico
y me asombra su densidad lávica, el sordo estrépito
con el que debieron caer, sacrificados, los guerreros
guanches desde lo alto en un cruel ceremonial chamánico.

 
Bajo el nivel del mar llegan hasta los 30 metros de profundidad

En una de sus cimas el Faycán invocaría al fuego
solar para que cubriera y fertilizase los sembrados.
Al pie de las colosales moles de sombríos piroclastos


Los indígenas canarios se referían a ellos como
la "Muralla del Diablo" o la "Muralla del Infierno"

sobre rocas y arena en el agua clara me sumerjo.
Es perpetua advertencia la altitud del acantilado
de que el poder de la naturaleza no hay que despertarlo.

(Poema escrito por Andrés González Déniz)



Los Gigantes se encuentran situados entre dos municipios:
Santiago del Teide y Buenavista del Norte

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