Uno de los artífices del penúltimo ascenso a 1ª

Pablo Ballesteros Lago

(Vegadeo, Asturias, 31 de agosto de 1974)

Mediocentro ofensivo con nervio, regate y tiro

PABLO LAGO

Como mármol de Carrara o safir

de Oriente vino de tierra asturiana

un buen centrocampista que, por su garra,

llamó la atención como el marfil,

Pablo Lago se formó en la cantera del Real Oviedo

el rubio ámbar, el ardiente rubí

o el oro de Saba. Tres temporadas,

noventa y un partidos con Las Palmas,

doce goles sin tarjetas rojas. Así

Luchando contra Lacruz del Athletic de Bilbao

fue su paso por aquí: dando asistencias

como aljófares, repartiendo juego

con su sabio criterio y mano diestra.

Militó en un grande por una temporada: el Atlético de Madrid

Contra el Elche el día del ascenso

dio dos pases de gol y con la derecha

marcó el cuarto que nos llevó al cielo.

(Poema escrito por Andrés González Déniz)

Fue un trotamundos del fútbol, puesto que equipos como el Lugo, Atlético de Madrid, Rayo Vallecano, Mallorca, Unión Deportiva Las Palmas, Racing de Santander, Sporting de Gijón y Numancia contaron con sus servicios