Antes de morir quería reflejar mi amor por el toreo

Una humilde ofrenda a la tauromaquia y a sus mártires: toros y toreros

Salía al ruedo con la rabia de los marginados

Antonio Chenel Albadalejo

(Madrid, 1932 – Majadahonda, 2011)

Torero de honda raigambre

“ANTOÑETE”

Afortunados quienes en el sesenta y seis vieron

dar sesenta muletazos al toro blanco “Atrevido”,

de la divisa de Osborne, a un torero magnífico

que desde entonces se consagró como un torero

Vio torear a sus ídolos, Belmonte y "Manolete", logrando emularlos

con un lugar en la historia. Los que a “Cantinero”

le aplicó en mil novecientos ochenta y cinco,

con cincuenta y tres años de edad, no es un cumplido

afirmar que fueron mejores, rozando lo perfecto.

Tenía una mano izquierda prodigiosa para dar pases con la muleta

Admiraba a Belmonte, Manolete y Rafael Ortega,

tratando de evocarlos con sus pases de capote,

arrimándose mucho a los pitones en las faenas.

Una terna insuperable, irrepetible, añorada e inolvidable:

Rafael de Paula, "Antoñete" y Curro Romero

Toreaba con un sexto sentido para la pureza

y su carrera siempre la interrumpían lesiones

de las que siempre regresaba con más fe en sus fuerzas.

(Poema escrito por Andrés González Déniz)

Lo sabía todo sobre los toros y lo aplicaba en el ruedo