De un gran escritor diletante, poderoso y turbador

 

Manuel Vicent

(Villavieja, Castellón, 1936)

 

"ESCRIBIR ES 
DESENTRAÑARSE"

 

"Uno, sobre todo si es escritor,

nunca ha salido de la infancia"

 

"El escritor hace públicas sus neurosis, nostalgias, frustraciones, su ridiculez y su lirismo. Es como una exposición en la que también se muestran sus opiniones políticas y sociales. Está como descarnado, viviendo a la intemperie, con todo al aire. Por eso este oficio es tan impúdico y tan desvalido y a la vez tan neurótico"

 

"Aristóteles define la tragedia como una purificación de pasiones.  La crisis significa cambio agónico y de ese esfuerzo siempre sale algo bueno. Esta crisis es a la vez económica y de valores, y en nuestro sector, de método. Estamos en medio de la corriente de un río, entre lo analógico y lo digital"

 

"Mi generación todavía tiene  en el ADN la autoridad de la palabra escrita sobre el papel, y no da crédito o autoridad a una cosa plasmática, fluyente, líquida, que de pronto aparece y desaparece"

 

 

 

 

"Las crisis purifican. Son purgas que el capitalismo se autoinflige para dejar las partes débiles en la cuneta. El problema es que hoy la información está pegada a la comunicación, la comunicación al espectáculo, y el espectáculo al negocio. Y no se sabe ya qué es una cosa u otra, y qué es noticia"

 

"Albert Camus era un artista que partió de su trayectoria vital y convirtió la moral y la rebeldía en una estética"

 

"El sarcasmo muy detonante no es literario,

resulta vulgar. Es mejor incidir irónicamente,

de forma indirecta"

 

"Desprecio  a los moralistas que van

siempre con el dedo señalando el camino"

 

(Fragmentos de una entrevista realizada por Francisco Luis del Pino Olmedo al escritor Manuel Vicent que se publicó en el nº 179 de la revista "Qué Leer" correspondiente al mes de septiembre)

 

 

La última obra de Manuel Vicent, Mitologías (Madrid, Alfaguara, 2012, pp. 296), viene a ser la continuación de los brillantes retratos que trazó en su anterior libro Póquer de ases (Madrid, Alfaguara, 2009, pp. 328)