lunes, 8 de octubre de 2018

Donde viven tabaibas, pinares, tuneras y almácigos



El Teide al fondo, el Pico Viejo delante y el barranco de Tágara en primer término con predominio de pinos y escobones en su flora

GUÍA DE ISORA

Lenta se cierne la noche que va apagando la atmósfera
brillante diurna. El aire de esta tierra a los pulmones
vivifica. Las piedras negras advierten como nubarrones
la reciente explosión volcánica que bordeó el pueblo.


El volcán Chinyero que erupcionó por última vez el 18 de noviembre de 1909 y el manto de rocas efusivas que dejó tras nueve días arrojando lava

Enclave cuyo nombre bautiza la princesa guanche Isora
y que colonizaron gomeros ampliando su horizonte.
A fines del siglo dieciocho una riada desde el monte
arrasó casas y vidas que ya ni están en el recuerdo.


Vivienda canaria en el casco histórico de Guía de Isora

La paz del lugar y su lejanía de los centros urbanos
con poder y alcurnia la convierten en una joya oculta.
Sus casas antiguas, abandonadas, hablan de un pasado


Horno para la cocción de tejas en Aripe

con vínculos agrícolas que se desmorona. Hubo mucha
hambre y necesidad. La riqueza la traían indianos
y hoy el turismo de la costa hace que su vida bulla.

(Poema escrito por Andrés González Déniz)


Playa de Abama en Guía de Isora

1 comentario:

  1. Parece que conoces bien la zona, son unas islas fantásticas. un abrazo

    ResponderEliminar