domingo, 22 de marzo de 2009

Un libro sin desperdicio


Cuando Nietzsche pasaba calamidades sin que sus libros tuvieran repercusión alguna, supongo que jamás pensó en la de veces que se le iba a citar a modo póstumo, la de reediciones que iba a gozar su obra y la inmensa bibliografía crítica que ha generado. Es el último de los grandes pensadores, no tanto por estar a la altura de Kant o Aristóteles como por no haber después de él nadie más grande.
En este volumen de autoayuda Allan Percy nos facilita el trabajo de encontrarle la utilidad práctica a muchas de sus ideas. Nada menos que noventa y nueve. De entre todas, elijo las siguientes:

1. Aquél que tiene un por qué vivir puede enfrentarse a cualquier cómo.

2. El destino de los seres humanos está hecho de momentos felices, pero no de épocas felices.

3. Nos encontramos a gusto en la naturaleza porque ésta no tiene opinión sobre nosotros.

4. Uno tiene que morir varias veces mientras sigue vivo.

5. Encontramos distinción en el infortunio como si sentirse feliz fuera un signo de vulgaridad.

6. Nuestro tesoro se halla en la colmena de nuestro conocimiento.

7. El honor no lo constituye nuestro origen, sino nuestro fin.

8. Un hombre absolutamente bueno sería un idiota.

9. La gente que nos hace confidencias se cree con derecho a oír las nuestras.

10. Es preciso amarse uno mismo para poder soportarse.

El joven Nietzsche

11. Solamente aquel que construye el futuro tiene derecho a juzgar el pasado.

12. El éxito ha sido siempre un gran mentiroso.

13. El hombre es un puente y no un fin.

14. Hablar mucho de uno mismo puede ser un medio para ocultarse.

15. Te castigarán por tus virtudes, sólo te perdonarán por tus errores.

16. El reino del cielo es una condición del corazón.

17. El hombre es un animal que juzga.

18. La mejor arma contra un enemigo es otro enemigo.

19. Los éxitos más grandes no son los que hacen más ruido, sino nuestras horas más silenciosas.

20. Ningún precio es demasiado alto por el privilegio de ser uno mismo.

21. La persona activa aprende sola.

22. Nuestras opiniones son la piel con la que queremos ser vistos.

23. El futuro influye en el presente de la misma forma que el pasado.

24. Se corrompe más a la juventud opinando como ella que haciéndolo de modo diferente.

25. En el amor siempre hay algo de locura. En la locura siempre hay algo de razón.

26. El que quiera aprender a volar, primero debe aprender a caminar, a correr, a bailar y a escalar.

27. Quien lucha contra los monstruos debe tener cuidado de no convertirse en uno.

28. Hay varias verdades, y por lo tanto no hay ninguna verdad.

29. La mentira más común es aquella con la que un hombre se engaña a sí mismo.

30. Deberíamos considerar un día perdido aquél en el que no hemos bailado ni una sola vez.

Friedrich Nietzsche visto por el pintor Edvard Munch

31. Si miras mucho tiempo al abismo, el abismo te mirará a ti. Es decir, que aquello en lo que piensas es lo que atraes.


32. Las posiciones extremas no son sucedidas por posiciones moderadas, sino por posiciones extremas contrarias.

33. El mérito en sí mismo es ofensivo.

34. Aquellos que no saben hacer reposar sus opiniones en el hielo, deberían evitar meterse en un debate acalorado.

35. Un amigo debería ser un maestro en adivinar y callar.

36. La potencia intelectual de un hombre se mide por la dosis de humor que es capaz de utilizar.

37. Saber ronronear como los gatos no equivale a saber amar.

38. Lo que distingue a los cerebros originales es que ven como si fueran nuevas las cosas viejas.

39. Aquel que no dispone de dos tercios del día es un esclavo.

40. El mejor medio de acudir en ayuda de las personas y tranquilizarlas consiste en alabarlas.

41. Nadie es tan loco que no pueda encontrar a otro loco que lo entienda.

42. A veces llevamos la contraria a una opinión sólo porque nos indispuso el tono con que fue expuesta.

43. Los animales ven en el hombre un ser igual a ellos en todo excepto en que ha perdido el sano instinto natural.

44. Amar implica conversar bien con alguien hasta la vejez.

45. El que venga a mí me hará un honor y el que se aleje me dará un placer.

46. Nada nos pertenece en propiedad salvo nuestros sueños.

47. El que no sabe dar nada tampoco sabe sentir nada.

48. Las ilusiones son placeres costosos, pero su destrucción es aún más gravosa.

49. La esencia de todo arte bello, de todo gran arte, es la gratitud hacia la vida.

50. Lo más frecuente es toparnos con copias de hombres y no con originales.

51. Quien no haya tenido un buen padre deberá procurarse uno.

52. El día tiene cien bolsillos cuando se tienen muchas cosas que meter.

53. No se odia mientras se menosprecia. No se odia más que al igual o al superior.

54. Cada cual es lo más lejano para sí mismo.

55. La guerra vuelve estúpido al vencedor y rencoroso al vencido.

56. El mundo real es mucho más pequeño que el de la imaginación.

57. La esperanza es un estimulante vital muy superior a la suerte.

58. Lo que no nos mata nos hace más fuertes.

59. El que ve mal, siempre ve poco. El que oye mal, oye siempre demasiado.

60. Todo idealismo frente a la necesidad es un engaño.

61. El camino correcto y único es algo que no existe. Hay muchos.

62. Cada convicción es una cárcel.

63. Uno encuentra su vida mejor cuando deja de compararla con la de los demás.

64. Olvida uno su falta después de haberla confesado a otro, pero el otro no la olvida.

65. La mejor manera de empezar el día es pensar al levantarnos en hacer feliz al menos a una persona.

66. La sencillez y la naturalidad son el supremo y último fin de la cultura.

67. ¿No es la vida cien veces demasiado breve para aburrirnos?

68. No siempre se ataca para vencer o hacer daño, sino para adquirir conciencia de la propia fuerza o hacer ostentación de ella.

69. Nuestras carencias son nuestros mejores maestros.

70. El remordimiento es como la mordedura de un perro en una piedra: una tontería.

Friedrich Wilhelm Nietzsche (Röcken, 1844 - Weimar, 1900)

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