Antes de que seamos lo que la muerte escombre

 

 El eco de la voz inmortal de Gilbert Bécaud
se escuchará eternamente en el Olympia parisino

 

 LO IMPORTANTE ES LA ROSA

Tú que marchas bajo el sol
sin dejar atrás cadenas,
que te ríes de las penas y el dolor.
Tú que duermes junto al mar
y eres libre cual las aves,
que todo alegre sabes soportar.

Lo importante es la rosa, créeme.

Tú que sueñas nada más
con la gloria y el dinero
y eres sólo prisionero de tu afán.
Tú que ves en el placer
el mejor de tus amigos,
piensa un poco lo que digo por tu bien.

L’important c’est la rose, crois-moi.

 

 

 

Tú que viste amanecer
en un mundo de pasiones
donde ya no hay ilusiones ni hay fe.
Tú que nunca has de tener
lo que el rico no valora.
Tú que sufres, tú que lloras, óyeme.

L’important c’est la rose.
Lo importante es la rosa, créeme.

Tú que escuchas mi canción
y sonríes con desprecio
como si yo fuera un necio charlatán.
No te burles, ya verás,
cuando acabes tu camino
al final también conmigo cantarás.

L’important c’est la rose, crois-moi.

(Canción compuesta por Louis Amade y Gilbert Bécaud

e interpretada por este último en el año 1969)

 

 

 Monsieur Gilbert Bécaud
(Toulon, 1927 - París, 2001)