Los terrores que pueda provocar la negrura del firmamento estrellado están aquí, junto con el acuciante problema de los satélites fuera de uso
GRAVITY
(GRAVEDAD)
(2013)
Merecedora de siete premios Óscar
al mejor director, montaje, fotografía, banda sonora, edición de sonido, mezcla
de sonido y efectos visuales, en esta película todo funciona como la seda hasta
el punto de que James Cameron la calificó como la mejor que se haya hecho sobre
el espacio. Y seguramente estaba en lo cierto, pues hay que tener en cuenta que
“Interestelar” se rodó un año más tarde (2014). Era una apuesta arriesgada para
la Warner, pues costó producirla nada menos que 100 millones de dólares. Afortunadamente, por
cada dólar invertido se recaudaron siete.
Las escenas causan vértigo y son técnicamente impecables
A 600 km de la superficie terrestre
no hay oxígeno ni presión atmosférica, la temperatura oscila entre 125 y -100
grados, y es ahí precisamente donde comienza la historia. La ingeniera
biomédica Ryan Stone (su padre le puso nombre masculino porque deseaba un niño
cuando nació) y el astronauta Matt Kowalski (George Clooney) están haciendo
labores de reparación y mantenimiento en su nave. Pronto son advertidos desde
la base en Houston sobre la inminencia de la llegada de basura espacial a gran
velocidad. Los desechos golpean la nave “Explorer” y matan a parte de su
tripulación. A partir de ahí comenzará una odisea en la que Ryan Stone (Sandra
Bullock) tendrá que intentar desplazarse para sobrevivir, primero hacia una estación espacial rusa, la “Soyuz”, y luego hacia otra
china, la “Tyangong”, ambas abandonadas y con serios desperfectos. Su compañero
Matt Kowalski la salvará dos veces, una físicamente y otra al aparecérsele en
sueños.
La fragilidad humana, nuestra pequeñez, la complicación y exactitud
tecnológicas o el desamparo sideral son algunos de los temas abordados
Las imágenes de este largometraje
impresionan por su virtuosismo visual. La Tierra se ve desde arriba como una
esfera titánica de colores azules, grises y verdosos completamente indiferente
al sufrimiento de sus criaturas. Incluso parece deshabitada. El amanecer en el
río Ganges es uno de los mejores momentos del guion, cuando Matt Kowalski lo
menciona al irse alejando en solitario hacia una muerte segura. George Clooney,
irónico y con sangre fría, realiza un papel soberbio, pletórico de inteligencia
y humor. Sandra Bullock, por su parte, ejecuta el mejor papel de su vida. Jamás
pude sospechar que tuviera tantas cualidades dramáticas. Probablemente la
acerada frialdad de su papel le ayuda.
No hay nada sobrenatural o esotérico en este film.
Todo lo que se ve no sólo es verosímil, sino factible
La trama es un mano a mano entre
dos actores que ambos resuelven a la perfección. Angelina Jolie y Robert Downey
Jr. iban a ser los elegidos para protagonizarla, pero por exigencias económicas
(Angelina pedía 20 millones de dólares) o problemas de agenda en el caso de
Robert Downey Jr., se quedaron fuera. El argumento es sencillo y fue escrito a
dos manos por el director mejicano Alfonso Cuarón y su hijo Jonás. Es difícil,
por no decir imposible, detectar cuánto hay de uno u otro en el desarrollo de la
historia. Las dificultades técnicas que tuvieron que superar merecen nuestro aplauso.
Téngase en cuenta que los efectos visuales ocupan 80 del total de 91 minutos
que dura este celuloide.
(Reseña escrita por Andrés González Déniz)
Sandra Bullock
(Arlington, Virginia, USA, 1964)
Se erige en la gran heroína de esta misión espacial
No hay comentarios:
Publicar un comentario