APOCALYPSE SOON
Existe un asteroide avanzando por el espacio
destinado a ser el próximo en chocar contra la Tierra.
No es que vaya a por nosotros, lo que pasa es que estamos
interponiéndonos en su trayectoria, y cuando venga
encontrará que algunos poderosos habrán emigrado
y lo observarán desde el firmamento. Tal vez pueda
desviarse con un disparo certero. Quizá no seamos
tan desafortunados y se aleje, rozándonos cerca.
Puede que lo veamos colisionar contra un planeta
lejano. Las posibilidades son de una entre cuatro.
Viene acercándose sin descanso, desmayo ni merma
de potencia. Viaja a través de la materia oscura
y se desgajó hace millones de años de otro astro.
Ya ha venido a vernos porque estamos en su órbita
y volverá con sus diez mil megatones de energía
que liberará en el choque como tarjeta de visita.
Tiene como aliado invencible al tiempo. Sin duda,
es un enemigo formidable que va a destrozarnos.
Acabará con los libros en un alarde pirotécnico,
destruirá la memoria de culturas que ya se han borrado
de la faz terrestre. Sobresaltará a unos durmiendo,
a otros trabajando o haciendo el amor o matando.
Será como una Pompeya en una pira de fuego
gigante arrojando piedra pómez de origen volcánico.
Y lo más crucial: fulminará la vanidad de nuestro ego.
Al fin será cierto que no somos nada de modo exacto.
Ay, monsieur, no me diga eso. Seamos optimistas e imaginemos que inventamos un arma capaz de desintegrarlo antes de que eso ocurra. Al fin y cal cabo inventar armas es lo que mejor se nos da, no es asi?
ResponderEliminarBuenas noches, monsieur
Bisous
Andrés esta vez tengo que darte la razón a pesar del optimismo que me suele invadir. Y me explico. Cuando oí esa noticia me sono a epitafio toda vez España será la responsable del seguimiento del asteroide. Que Dios nos coja confesados, aunque igual dos segundos antes del choque nos avisan del impacto.
ResponderEliminarUn abrazo.
Mucha falta nos hace, pero que mucha, que venga alguien o algo, lo que sea, y que nos fulmine ese ego que todos llevamos encima, yo el primero.
ResponderEliminarSería, como dijo el de la luna, un gran salto para la humanidad.
Saludos.
Un recordatorio imprescindible de que, en realidad, no somos nada. Con todo, espero que no llegue a producirse esa catastrofe... Aunque, haciendo un poco de ficcion, tampoco estaria mal que se llevara por delante a los que matan.
ResponderEliminar(Disculpa, no me van los acentos) Un abrazo.
Y yo pensé lo mismo que nuestro maestro Fernando;entonces... hablás de mi gobierno también?
ResponderEliminarTerrible y perfecto poema,
un abrazo,Andrés!