sábado, 7 de noviembre de 2009

El escritor de mayor elegancia en nuestro idioma


CERVANTES
(Alcalá de Henares, 1547 - Madrid, 1616)

Retrato de Juan de Jáuregui realizado en 1600


Miguel de Cervantes y Saavedra

Logró desenvolver la elegancia del lenguaje
como si no hubiera esfuerzo en contar historias.
Llenó el imaginario español con dos personajes
que son el alfa y omega de los seres humanos.


Estatua de Cervantes en la Biblioteca Nacional de España en Madrid.
Esculpìda en mármol blanco de Carrara (Italia)
por el catalán Joan Vancell Puigcercós en 1892


Su vida fue una concatenación de maldiciones.
Padeció la guerra, el secuestro, los latigazos,
pobreza, vilipendios e ignominia en la cárcel.

Gracias a sus desdichas pudo concebir la obra
con la que nos reímos porque nos vemos suplantados.


Casa de Valladolid donde vivió Cervantes ente 1604 y 1606


Conoció el peligro de locura que acecha en libros
y supo de bajezas de los hombres como nadie.
Cuentan que hubo de vivir a costa de prostituirse
sus hermanas. A la puerta de su casa ocurrió
un fatal lance. Sus huesos no sé dónde descansan.


Retrato idealizado de Miguel de Cervantes grabado en 1791

2 comentarios:

  1. Hoy es una figura muy ilustre la que honra su blog. A ver quien supera a este caballero. El de mayor elegancia, como usted dice.

    Yo creo que don Quijote lo suplantó a usted, sí. Tal vez Alonso Quijano se haya reencarnado en don Andrés.

    Feliz fin de semana, monsieur. Disfrute de su dolce fare niente.

    Bisous

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  2. Una vida azarosa y muchas veces desgraciada para un escritor insuperable.

    Leí el Quijote completo hace ya muchos años, y lo tengo como una de las relecturas pendientes.

    Saludos.

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